Te propongo que leamos aquel libro que siempre quisiste leer en pareja,
buscar juntos el significado de extrañas palabras.
Te propongo un día de tormenta, despeinada y sin maquillaje,
enredada en tus brazos y tus piernas.
Te propongo un apagón a la luz de la vela,
hacer figuras con las estrellas y cantar canciones de Silvio Rodríguez.
Te propongo la verdad o se atreve y prometo casi siempre atreverme.
Te propongo cosquillas en los pies y besos en la panza,
escribir confesiones en tu espalda y dejar que las descifres.
Te propongo jugar, pero solo con nuestros cuerpos,
cometer algún desliz y hacer de ese error un acierto.
Te propongo música bonita y cartas al estilo años veinte.
Te propongo sembrar flores en vez de cortarlas y ver salir el sol al amanecer.
Te propongo sándwiches calientes en el parque al estilo picnic,
fogatas con malvavisco y vino,
y correr descalzos bajo de la lluvia.
Te propongo baños de burbujas y mimosas al desayuno,
hacer la guerra pero solo mientras hacemos el amor.
Te propongo ser tu cómplice y tu confidente, amigos y amantes,
Y bueno… el resto ya depende de ti, si aceptas.
Te propongo…
Acepto encantado… 😉
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