La verdad es que en estos últimos meses con todo lo que ha estado pasando a nivel personal, social, ambiental y mundial no me han dado ganas de escribir. ¿No sé si alguno de ustedes les ha pasado? Desde principios de Septiembre de este año, se me fue la musa al suelo ¡Es como si toda inspiración que traía hace semanas atrás se me hubiese ido entre lágrimas o se me escapo por las gritas del corazón!
A veces se siente como si fuese demasiado, ¿No creen? Siempre hemos vivido entre guerras, injusticias y abusos. Siempre han ocurrido desastres naturales aquí o allá. Pero ahora es como si todo estuviese junto, todo sucede al mismo tiempo, tal cual como una película de Hollywood pasa todo en frente de nuestros ojos y vemos como se cae el velo y la realidad resulta a veces más irreal que las películas. Nuestro hermoso planeta tierra se revela, desesperada intenta acomodarse y limpiarse para sobrevivir causando desastres naturales, las máscaras de los gobiernos se caen, el control de masas y de la elite resulta mucho más evidente, los abusos a las mujeres y los menores está a flor de piel en todo el mundo, entre muchas otras cosas más que suceden y por consiguiente nosotros no logramos escapar de la sensación de angustia e incertidumbre que causa saber y ver todos las imágenes que llegan como olas sin descanso por las redes. Digo ‘las redes’ porque aunque también muestran algunas cosas por la televisión, tiendo a no confiar mucho en las «versiones oficiales de los hechos» según los medios comunes estipulados. Así que decido investigar por mi cuenta…, pero bueno ese es otro tema para otro post.
Retomando, es que así no nos esté afectando directamente a nosotros – que en ese caso seriamos privilegiados – así seamos de los que tratamos de evitar ver ‘las noticia’ y escuchar ‘la radio’ para no sentirnos mal, aun así, si tienes un corazón sensible y tienes empatía no puedes evitar el que te afecte. Se respira en el aire el dolor ajeno, la preocupación colectiva. ¿Se han dado cuenta? Y es que no son unos cientos, ni siquiera son unos miles, son millones y millones de seres los que se encuentran así en este mundo. Quizás somos los que estamos más conectados con las energías; los perceptivos, los que podemos sentir todo esto inmediatamente. Esa tristeza interna que viene de no se sabe dónde, es muy difícil de ignorar. Pero como no sentirla si es que al fin y al cabo todos estamos inter-conectados como por un circuito y por ende percibimos, sentimos y hasta somatizamos la angustia, el dolor y el miedo de otros seres que en este momento estén padeciendo o sufriendo alguna calamidad. ¿Entonces que podemos hacer cuando eso pasa? ¿Cómo podemos ayudar? ¿Hay alguna forma de ayudar? ¿Por dónde podemos empezar?
Nosotros los que tratamos de iluminar un poco este mundo con granitos de arena, con una sonrisa a la vez, con una frase de afirmación al día, con una expresión de gratitud, con un momento de generosidad, con una oración, con un perdón dado de corazón, y con tantas otras cualidades más que nos identifican como ¡seres humanos!… ¡Debemos dar más! Tenemos el deber de dar más.
«Este es nuestro planeta, estos son nuestros hermanos, este es nuestro legado»
Tenemos que mandar amor compasivo a doquier y digo ‘compasivo’ porque hay que empezar a perdonar y a comprender, a empatizar y a solidarizarnos, hay que dejar los egos a un lado y sentir el amor real y darlo. Mandar olas y olas de energía transmutadora en cada momento que tengamos la oportunidad, desde donde estemos. Empezando con el ‘YO SOY’ porque ‘yo soy’ el primero que debo recibirlo de mí mismo para así poder darlo a los demás. Es ese el amor que nos ayudara a trascender este dolor personal y colectivo y así poder superarlo. De esa manera ayudaremos a elevar la energía de la conciencia colectiva del mundo y por consiguiente a CAMBIARLO.
Hoy hago una declaración y los invito a los que quieran hacerla conmigo:
«Yo voy a cambiar el mundo porque sé que el cambio empieza por mí. Yo participare activamente en todo lo que pueda para ayudar a que este planeta sea un mejor lugar para vivir. Empezare por observarme a mí mismo y modificarme con amor si es necesario para así crear una nueva conciencia de tolerancia, comprensión y solidaridad. Yo también me comprometo con amor a ayudar a los que pueda y deseen mi ayuda en este poseso porque entiendo que es la única forma de lograr el objetivo de liberarnos de la opresión y el control. Empezare ahora mismo, desde este mismo lugar donde me encuentro y no me detendré hasta ver el mundo en el que deseo vivir. Así es»
Se coherente con lo que piensas, lo que dices y lo que haces
Como dice la canción de Michael Jackson «Man in the Mirror»
I’m starting with the man in the mirror > Empezare con el hombre en el espejo
I’m asking him to change his ways > Le estoy pidiendo que cambie sus formas
And no message could have been any clearer > Y no hay mensaje que pueda ser mas claro
If you wanna make the world a better place > Si quieres hacer un mundo mejor
Take a look at yourself, and then make a change > Mírate bien a ti mismo, y has el cambio.
Tienes mucha razón es difícil asimilar todo lo que está ocurriendo en el mundo y es inevitable q a veces nos sintamos así pero tenemos q seguir adelante tratando de tomar conciencia y sobre todo como dices empezar por nosotros mismos, si cada uno hiciera su trabajo y tomara conciencia real de ser mejores personas cada dia, ésta humanidad se podría salvar el tema jodido es que todavía hay mucha gente que todavía no ha despertado a la realidad. Saludos mi chica cósmica!! Man in the mirror love it!!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Hola Carlos! estoy de acuerdo contigo, debemos y tenemos que seguir adelante poniendo siempre lo mejor de nosotros y tratando al máximo de aportar algo mejor al mundo. Lo del despertar es cierto, pero solo se necesita una masa critica de la humanidad para cambiar el mundo. no podemos perder la esperanza. Nuestro trabajo es ayudar a que los que aun están dormidos o somnolientos, despierten pero con amor no con miedo. Bendiciones para ti!
Me gustaMe gusta
Sucede a veces que parece que debemos cargar con el mundo sobre nuestros hombros e intentamos detenerlo con las manos. pero él sigue girando y girando, qué, por otra parte, es lo único que sabe hacer. Un abrazo.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Carlos así es, no lo podemos detener ya que esa es su tarea, girar! Pero si podemos ayudarle en esa tarea para que su trabajo no sea tan forzoso, Claro esto no es trabajo de unos pocos sino de todos! Ese es el problema, que solo unos tantos somos los que estamos tratando de hacer la diferencia y pues la carga es pesada pero no sera así siempre, entre mas se unan a la causa menos pesada sera. Bendiciones para ti!
Me gustaLe gusta a 1 persona